La firma de un convenio entre la Cámara Departamental de Industrias de La Paz (Cadinpaz) y la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), busca fortalecer la articulación entre la industria y la academia, promoviendo acciones conjuntas en investigación aplicada, innovación, emprendimiento y desarrollo tecnológico.
El acuerdo fue firmado por el presidente de Cadinpaz, José Eduardo Iriarte Tineo y la rectora de la UMSA, María Eugenia García Moreno, consolidando una alianza que busca integrar las capacidades científicas y técnicas de la Universidad con las necesidades y desafíos del sector productivo paceño.
En la oportunidad, Iriarte destacó la importancia de transformar la realidad productiva del departamento. “Queremos que la industria sea un laboratorio vivo, donde el talento universitario pueda generar soluciones reales de impacto económico y social”, dijo.
De esta forma se posibilitará la investigación aplicada, programas de emprendimiento y el desarrollo de soluciones innovadoras con impacto económico y social.
Con la firma de este convenio, la Cadinpaz y la UMSA reafirman su compromiso con el desarrollo sostenible del departamento, fortaleciendo la vinculación entre la academia y la industria como pilares fundamentales para la competitividad, la productividad y el progreso tecnológico de La Paz.
Posteriormente, tuvieron lugar dos charlas magistrales sobre soluciones tecnológicas para la industria, oportunidades para los sectores de energía y medioambiente y los bioprocesos sostenibles para la industria: innovación, aplicaciones y perspectivas desde la UMSA.
La firma del convenio se dio en el marco de la Expo UMSA 2025, evento que reúne los proyectos más innovadores y soluciones para la transformación del país.
Los organismos internacionales plantean que los países deben fortalecer sus recursos humanos mediante un apoyo efectivo a la educación y a la formación de profesionales.
Bolivia está rezagada en la preparación de recursos humanos, y más con la puesta en marcha de la Ley Avelino Siñani, que ahora los educadores y otros sectores opinan que debe cambiarse, pues sólo perjudicó al estudiantado.
Así lo demuestra un estudio realizado en la presente gestión, en el que se evidenció la mala preparación en matemáticas y lenguaje.
Las universidades ya indicaron que los bachilleres llegan a las casas de estudio con deficiencias y se pierde tiempo en actualizarlos y prepararlos para ingresar a la academia.
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