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En Santa Cruz se construyen casas ahorradoras y sostenibles. El concepto se denomina “eficiencia energética”, a través del que se registra un significativo ahorro en el consumo de agua y electricidad. Si bien demanda una inversión de solo un 7% más, los resultados son muy significativos en la economía familiar y en el impacto ambiental.
Las certificaciones en edificaciones verdes no son nuevas en el mundo ni en la región, pero en Bolivia hay muy pocos referentes de este tipo de certificaciones. La opción de certificación para estas casas es EDGE (Excellence in Design for Greater Efficiencies), un sistema de certificación de construcción sostenible que se focaliza en hacer edificios más eficientes y que certifica esta tendencia en más de 170 países.
Estas casas verdes tuvieron varias estrategias para disminuir el consumo de energía, algunas de éstas fueron la orientación correcta de las viviendas, los elementos de sombra, la cantidad de ventanas y los techos de color blanco para la disminución de islas de calor. Uno de los factores más importantes son los materiales aislantes; por ejemplo, en el caso de muros, losas y cubiertas se utiliza un panel de poliuretano expandido de alta densidad tejido con alambre galvanizado con un revoque de cemento, lo cual garantiza una aislación térmica y acústica en los cerramientos.
Para las ventanas se utilizan termopaneles de doble vidriado de PVC. Los equipos de aire acondicionado, refrigerador y lavadora son de calificación “A” en eficiencia energética, también se toma en cuenta luces led en general. En algunos exteriores y áreas comunes se colocan sensores de movimiento y fotocélula (se activa solo en las noches) para las luminarias. También se reduce el consumo de energía eléctrica en las hornillas y el horno de la cocina y calentadores de agua, al ser éstos a gas (esto es muy práctico en nuestro país), y se emplean paneles solares como energía alternativa.
En el caso del agua se utilizan inodoros de doble descarga con menores consumos, reductores de presión y aireadores en grifos y duchas lo que disminuye el consumo de agua hasta en un 70%, pues la cantidad de agua que sale del grifo es mucho más de lo que realmente se necesita.
El presupuesto de la construcción es de un 7% mayor al de una construcción estándar; sin embargo, tiene muchos beneficios. Quienes optaron por este modelo, gozan de un espacio interior que no tiene fugas de temperatura porque con unos minutos de aire acondicionado o calefacción, el ambiente conserva los niveles de temperatura por mucho más tiempo.
Construir sosteniblemente es posible y está al alcance de las personas, además que hay nuevos programas de préstamo bancario para casas verdes con intereses preferenciales. En Santa Cruz y en varios municipios del país se está fomentando las construcciones más eficientes aumentando el área máxima a construir e incentivando a los desarrolladores.
La nueva manera de construir casas ahorradoras de energía fue iniciada en Santa Cruz por esta empresa constructora que empezó sus actividades en 2005. Con más de 10 años de experiencia en estrategias de sostenibilidad en la construcción, ha innovado los procesos y usos de materiales, mejorando la calidad de vida de las personas que las habitan. Cuenta con un equipo de personas especializado para lograr certificaciones en edificios verdes EDGE y LEED, ha construido en varias ciudades de Bolivia y tiene presencia en La Paz y Santa Cruz.
La empresa Habité ha logrado una certificación preliminar EDGE para dos casas adosadas (casas pareadas) en la ciudad de Santa Cruz en un terreno de 850 m2, con un ahorro de hasta el 76% en electricidad, 35% en agua y el 58% en disminución de energía acuerpada en los materiales.
Para más información sobre casas sostenibles ingresa a:
Website: https://edgebuildings.com/project-studies/viviendas-pareada-las-brisas/
Facebook: https://www.facebook.com/habite.arq
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