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El Directorio del Banco Central de Bolivia (BCB) aprobó el viernes 27 de marzo, la otorgación de un préstamo de Emergencia Sanitaria de Bs 7.000 millones ($us 1.000 millones) al Órgano Ejecutivo para “preservar la vida de los bolivianos y evitar el estado de crisis que viven sociedades más desarrolladas, que tardaron en dar respuesta a la pandemia”.
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El BCB aclara en un comunicado que está autorizado a conceder préstamos al Ejecutivo por lo dispuesto en el Artículo 22 inc. A de la Ley No 1670, que responde a la Emergencia Sanitaria derivada del Coronavirus y “cuyo único propósito es evitar el luto de la familia boliviana, sin importar el costo que el Estado deba asumir”.
El BCB subraya que los montos otorgados al Estado se encuentran respaldados, y con la decisión asumida se logra inyectar recursos tanto al sector público como el privado, para que sigan trabajando por Bolivia.
Asimismo, el ente regulador informa que trabaja para coadyuvar en las soluciones emergentes de la pandemia que aqueja al planeta, y para ello cuenta con las instancias técnicas que permiten responder a la dinámica que nos impone el drama causado por el COVID-19.
El miércoles pasado a través de una operación no convencional, el BCB inyectó Bs 3.476 millones que son canalizados por el sistema financiero nacional, con lo que se incrementó en 50% la liquidez de las Entidades de Intermediación Financiera (EIF) para sostener la demanda interna.
“Este esfuerzo conjunto entre el sector privado y público, se hizo en el marco de la normativa y la Ley del Banco Central de Bolivia; con la aprobación del Directorio del Ente Emisor”.
El Gobierno dictó hasta la fecha diferentes decretos supremos cuyo espíritu es crear mecanismos que permitan frenar la expansión del coronavirus.
El Decreto Supremo 4196 declara la emergencia sanitaria nacional y cuarentena en todo el territorio del Estado Plurinacional de Bolivia, contra el brote del coronavirus.
Posteriormente, el Órgano Ejecutivo emitió el Decreto Supremo 4197 que tiene por objeto establecer por única vez el Bono Familia y, además, la reducción temporal de las tarifas eléctricas, en el marco de la emergencia sanitaria nacional.
Se amplía los beneficios a través del Decreto Supremo 4198 que autoriza el diferimiento y facilidades para el pago de impuestos sobre las utilidades de las empresas, deducción de donaciones a hospitales, medidas favorables a los profesionales y otras, en el marco de la crisis del Coronavirus.
El Decreto Supremo 4199, con base en la declaratoria de la emergencia sanitaria nacional, declara cuarentena total con suspensión de actividades públicas y privadas hasta el 4 de abril del 2020, para evitar el contagio.
Se recomienda al BCB en coordinación con la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) y con las EIF y de Servicios Complementarios, la disposición de los mecanismos necesarios para garantizar la circulación de la moneda nacional en todo el territorio del Estado.
También dispone que se garantice que los cajeros automáticos cuenten con efectivo en todo el territorio nacional.
La expansión del virus está relacionada con la decisión de acatar las medidas de prevención. Un gran porcentaje de la población aceptó la cuarentena, pero esta debe ser asumida por el 100% de los bolivianos, señala el ente emisor.
En ese marco, al evaluarse que sectores decidieron auto marginarse de las medidas de protección se dicta el Decreto Supremo 4200, que endurece las medidas emergentes de la Emergencia Sanitaria Nacional y se extiende la cuarenta en el territorio hasta el 15 de abril del presente año.
Asimismo, establece una serie de paliativos para los sectores menos favorecidos de la sociedad.
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