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La ciudad de Santa Cruz vive el boom de la construcción de edificios. Arquitectos y planificadores urbanos cruceños consideran aspectos que, hasta hace 20 años, no eran prioritarios. Los diseños inteligentes, la calidad de la construcción, eficiencia energética, sostenibilidad, esparcimiento y servicios, así como una gestión adecuada para garantizar calidad de vida a los dueños de los inmuebles en propiedad horizontal son factores que adquieren una relevancia en las propuestas.
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Gabriel García, director de la carrera de Arquitectura de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, sostiene que “al tener en cuenta estos aspectos, se puede contribuir a la creación de espacios habitables, confortables y sostenibles que mejoren la calidad de vida de los propietarios de departamentos en la capital oriental».
Sin embargo, quien visita Santa Cruz de la Sierra, además de sentir la hospitalidad del cruceño, evidencia que los edificios están dejando atrás las casas con espacios verdes y grandes áreas de recreación. La ciudad, poco a poco, va perdiendo su atributo verde que la caracterizaba y se está convirtiendo en otra “selva de cemento y ladrillo”.
“Para preservar la esencia de una ciudad verde en Santa Cruz de la Sierra a pesar de la predominancia de los edificios, es necesario incorporar áreas verdes, espacios recreativos, infraestructuras sostenibles y promover la movilidad sostenible”, indica el académico.
La renovación de propuestas habitacionales en la capital oriental contiene diversas aristas. Con la aparición masiva de edificios y el boom de la construcción, es momento para considerar la educación ambiental en la concienciación de los residentes. De esta forma se mantiene la vegetación y la biodiversidad en la ciudad. “Se puede lograr un equilibrio entre el desarrollo urbano y la preservación de la esencia verde de Santa Cruz de la Sierra”, agrega el académico.
La construcción y el uso de edificios es responsable de casi el 40 % de las emisiones de CO2 y del 35 % del consumo de la energía en el mundo. Una de las apuestas para reducir el impacto en el medioambiente es la construcción sostenible, aquella que utiliza métodos y materiales renovables.
García indica que las construcciones sostenibles son aquellas que incorporan prácticas y tecnologías que reducen el consumo de energía, agua y recursos, minimizan la generación de residuos y promueven un ambiente saludable.
“Estas construcciones buscan alcanzar un equilibrio entre las necesidades humanas, la protección del medio ambiente y el desarrollo sostenible a largo plazo.”, asegura.
La domótica contribuye de gran manera en las construcciones sostenibles, porque permite una mayor eficiencia energética, mayor comodidad y seguridad para los residentes. Para el académico, el aporte que ofrece la domótica pasa por una «mayor integración de tecnología en los edificios y una mejora en la calidad de vida del usuario”.
Las construcciones sostenibles tienen como objetivo principal minimizar el impacto ambiental, promover el uso eficiente de recursos, mejorar la calidad de vida de los ocupantes y contribuir al desarrollo sostenible en el tejido urbano.
En ese contexto, ciudades como Santa Cruz de la Sierra deben adoptar enfoques sostenibles en la arquitectura y construcción urbana, integrando prácticas eco-amigables, eficiencia energética, conservación del medio ambiente y soluciones tecnológicas como la domótica.
Estas construcciones, según García, son fundamentales para construir ciudades más resilientes, equitativas y respetuosas con el medio ambiente.
“Es importante abordar el desarrollo urbano de manera responsable y sostenible, considerando el impacto en el medio ambiente, la sociedad y la economía. La adopción de un enfoque sostenible en la arquitectura y construcción puede crear entornos habitables y funcionales, promoviendo el bienestar de todos”, señala el arquitecto.
En 2019, el periódico argentino ‘La Nación’ calificó a Santa Cruz de la Sierra como “la nueva ciudad estrella de América”.
En 2014, Sergio Cerezo Aguirre publicó una investigación titulada “Boom en el sector inmobiliario en Bolivia: ¿burbuja o fundamentos económicos?”. En el informe se da cuenta que, en los últimos años, Bolivia ha experimentado un crecimiento notable en el área de la construcción impulsado por el sector público y privado.
El auge inmobiliario que se presenta en el eje central del país y se manifiesta de forma más dramática en la capital oriental y municipios aledaños, con construcciones por encima de los 30 pisos y una expansión urbana que llega, incluso, a la construcción de una ciudad completa para más de 300 mil personas.
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