Destacan las bancas comunales como incentivo al emprendimiento femenino

La Razón / Agosto 21, 2018

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Fuente: La Razón

En Bolivia, Nicaragua, México, Perú y Argentina en los últimos años, se han creado más de 25 mil bancos comunales  que nacen en barrios populares liderados principalmente por mujeres en situación de vulnerabilidad. Pro Mujer Institución Financiera de Desarrollo (IFD) destaca que esta modalidad es un incentivo al emprendimiento femenino.

Hace 11 años Leticia Torres inició una venta de abarrotes en una pequeña mesa y bajo la sombra de un árbol en algún lugar de México. Paula Colque tenía un vasto campo para viñedo en Tacna, Perú pero no cultivaba por falta de recursos, al igual que ella, toda su familia estaba en situación de desempleo. Doña Pura Salvatierra, de Bolivia pasó una difícil situación económica, sumado a que nadie creía en su espíritu emprendedor y a falta de garantías no era sujeto de crédito en la banca comercial.

Sus historias se replican en cerca de 300 mil mujeres laboriosas alrededor de Latinoamérica, la región que atiende Pro Mujer, una organización experta en mujeres que ofrece una plataforma de servicios orientados al fortalecimiento de las capacidades de las mujeres, ofreciendo inclusión financiera, capacitación y salud.

Patricia Claure, directora de Fundación Pro Mujer IFD, ha indicado que la mayor parte de la población que atiende tiene un promedio de 40 años de edad que en su mayoría son jefas del hogar que buscan, más que negocios de subsistencia, crecer aprovechando las oportunidades del mercado.

Algunos estudios como El Informe Mundial GEM 2017 (Global Entrepreneurship Monitor), indican que la actividad emprendedora es más alta en economías con menor desarrollo como la de América Latina y el Caribe donde alcanza el 18,5%.

Sin embargo, según investigaciones del Fondo Monetario Internacional estima que en América Latina y el caribe unas 130 millones de personas están bajo economía informal. Por ejemplo en México el 53.8%, Perú 64% y Bolivia que ronda el 50 al 64% engloba a ciudadanos que generan sus propios ingresos. Mientras el informe mundial de emprendimiento registra que un 17% de estos tienen a una mujer como líder.

Existen, según la experiencia de las emprendedoras, varios caminos para llegar al éxito. Uno de ellos es tener el espíritu de superación. Pertenecer a una comunidad, una excelente alternativa es organizarse en grupos que cumplan ciertas características para poder financiar sus negocios. Está demostrado en el mundo, que el modelo de Banca Comunal, una metodología crediticia de gran impacto promete romper con el círculo de la pobreza.

Pura Salvatierra es una líder en su grupo y cuenta “estoy feliz porque en mi banco comunal tengo las puertas abiertas para sacar créditos e invertir en mis planes financieros. Pro Mujer me brindó el apoyo con la garantía de mi palabra cuando era lo único que tenía”.

Lo primero, recuerda Laura Torres  quien ha liderado la organización de su banca comunal, es que las mujeres de su grupo incluyéndose comprenden la importancia del ahorro, aunque la mayor enseñanza demostrada a través de esta metodología es la solidaridad y la responsabilidad de cada socia, asegura.

El préstamo es una oportunidad para hacer crecer mi negocio, así fue como construí un espacio para tienda de abarrotes y ahora también una tienda de regalos. Mi mayor logro es haber podido sacar adelante a mi familia con base en el trabajo, ver que son personas de bien me hace sentir orgullosa” afirma esta mujer quien además vence un cáncer de hígado.

Las bancas comunales son organizaciones de la propia comunidad o barrio integradas por un mínimo de 8 integrantes, son personas solidarias, tienen pequeños negocios y son responsables. Se reúnen cada 14 o 28 días para hacer el repago de su crédito y en esa ocasión son capacitadas por una asesora de crédito en temas financieros, de salud o de empoderamiento.

Según, Patricia Claure, este mecanismo crediticio permite llegar a un gran número de mujeres en situación vulnerable no solo económicamente, pues existe un gran componente educativo que compromete y las motiva para aprender a ser financieramente independientes, fuertes y saludables, destaca.

En Bolivia, Fundación Pro Mujer IFD ha llegado a colocar al año  más de 139 mil créditos entre la comunidad y mensualmente colocar hasta Bs 11,034,178 en manos de mujeres emprendedoras dinero que una persona en situación vulnerable no encuentra fácil en las entidades financieras del país.

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