Hugo Kantis: “A Bolivia le hace falta capital humano emprendedor”

El Deber / Septiembre 21, 2015

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Hugo kantis

Hugo Kantis. Fuente: El Deber

El ICSEd-Prodem perfila una mirada de América Latina en el nuevo escenario global. Kantis, muy entusiasmado, explicó los alcances de esta nueva visión de desarrollo en una oportunidad que le dio el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en La Paz.

¿Qué significa el índice de las condiciones sistémicas para el emprendimiento dinámico?

Es una herramienta (ICSEd-Prodem) que permite identificar las fortalezas y debilidades de los países y ayuda a definir una hoja de ruta para promover el emprendimiento. Este índice fue lanzado por primera vez el 2014, por el Programa de Desarrollo Emprendedor (Prodem).

¿Cuál es la importancia de este índice para los países?

Permite conocer la posición de cada país en un ranking internacional conformado por 56 países, 15 de América Latina. Las 10 dimensiones que conforman el ICSEd-Prodem están construidas en base a la normalización de 41 variables obtenidas de varias fuentes de datos reconocidas internacionalmente como el Banco Mundial, Unesco, etc.

¿Cuáles son estas dimensiones para medir las condiciones emprendedoras de un país?

Se miden las condiciones sociales, el capital humano emprendedor, la cultura, el sistema educativo, las condiciones de la demanda, la plataforma de CTI (Ciencia y Tecnología para la Innovación), la estructura empresarial, el capital social, las políticas y regulaciones y el financiamiento.

¿Qué se resalta de ellas?

Todas son importantes. Algo que es vital para los emprendedores es tejer redes de contacto, es algo que existe en la sociedad. Si hay puentes entre los distintos segmentos de la sociedad o si es una sociedad donde hay muchas barreras. Si la sociedad es cerrada es más difícil para los emprendedores tejer estas redes tan vitales. También nos interesa ver en qué medida hay acceso al financiamiento y también qué hacen los gobiernos para hacerle la vida más fácil con sus políticas, normas a lo que se emprende. No solo nos interesa si a la macroeconomía le va bien.

Para que al emprendimiento le vaya bien le tiene que ir bien a las condiciones sociales, al sistema educativo, ciencias y tecnología.

¿Quién debería valorar más este tipo de información?

Los gobiernos deberían tener – para orientar sus políticas-, el sistema educativo en las universidades para dirigir sus currículos y los actores del sistema financiero, para ver qué condiciones hay para que las empresas que surgen les vayan mejor. Es una herramienta de política pública muy importante. Está pensado para que los gobiernos en particular le presten atención. A los mismos emprendedores para ver la piscina en la que van a poder nadar.

¿Cómo está Bolivia?

Ha mejorado su indicador de condiciones sistémicas. Ha crecido un 27%, pero continúa en condiciones medias bajas. Ha pasado de ser, en América Latina, de la posición 13 a la 11. Este es un avance importante, pero no ha pegado un salto fuerte. Hubo mejoras en las condiciones sociales, mejoras a nivel del gasto en educación, mejoras en distintos planos que han llevado a que esto suceda. Aún hay una necesidad muy importante de avanzar fuerte en materia de distintos planos.

¿Cuál es el talón de Aquiles?

Bolivia necesita trabajar en materia de capital social; es decir, en qué medida en esta sociedad es fácil tejer redes de contacto. Los emprendedores bolivianos lo necesitan sí o sí. En eso hay que mejorar mucho. También hay que mejorar en financiamiento para emprendedores. En Educación y formación de capacidades emprendedoras. Hace falta más capital humano emprendedor. Contar con aquellos que ambicionan, que tiene vocación, capacidad de generar una nueva empresa, que pueda generar empleos no solo para sí mismos, sino crear riqueza y empleo para muchos otros bolivianos. Pagar buenos salarios.

¿Qué hará falta para revertir estas necesidades?

Por ejemplo, creemos que es necesario montar un sistema en el cual actores de distintos perfiles, como la sociedad civil, el gobierno, los sectores privados, puedan aliarse y trabajar articuladamente y en ese campo. Le toca a la política pública un papel muy importante.

¿En qué está bien Bolivia?

Está bien en las condiciones de la demanda. La economía boliviana venía creciendo fuertemente y enfrenta un desafío en que los precios internacionales de los bienes que exporta están cayendo y buena parte del crecimiento ha tenido que ver con buenos precios internacionales que a su vez, han ayudado a que el Estado financie políticas públicas de activación de demanda. Todo eso fue positivo. Por un lado, genera oportunidades y, por otro, se ensanchan las clases medias de la mano del crecimiento económico.

Eso es un aspecto muy positivo que tiene Bolivia. Por otro lado, a nivel genérico hay muchos emprendedores, microempresas, autoempleados, que es otro perfil, pero de todas maneras hay una cultura que la sociedad reconoce a estos emprendedores. Esto es positivo.

¿El índice da condiciones inequívocas?

Por ahí no es necesario que todo esté perfecto al mismo tiempo, pero todo cuenta.

Nosotros no desconocemos que los indicadores son aproximaciones imperfectas a la realidad. Pero a través de ellas, basados en un marco conceptual que da cuenta de todos los factores que inciden en este perfil de emprendimientos y con las limitantes de la información parcial que captamos, creemos aproximarnos a la realidad, para orientar dónde aprieta el zapato y dónde hay que colocar las prioridades.

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